01/12/2020

Sustentabilidade

Nuevas alianzas amplían la producción sostenible del agronegocio

Paraná, 1º de diciembre de 2020 – Klabin, mayor productora y exportadora de papeles para embalajes de Brasil, está ampliando el alcance de las acciones de su área forestal, que promueven el desarrollo sostenible en las dimensiones económica, social y ambiental. “Plante con Klabin”, que es la evolución del programa de fomento, va a brindarles más seguridad a los productores en la comercialización de su producción forestal a largo plazo, incluyendo términos que garantizan la venta con un precio mínimo y que considera también posibles correcciones monetarias, garantizándoles así las ganancias futuras a los productores.

 

“Plante con Klabin” hace una alianza con propietarios rurales para la producción de bosques y para la adquisición de la madera y, por medio del programa Bosques Legales, ayuda a crear un sistema de producción integrado en esas propiedades, lo que armoniza los bosques plantados con los cultivos de la ganadería y de la labranza, como la producción de granos y leche, por ejemplo. Todos los participantes realizan acciones de planificación para la propiedad para que se desarrolle de manera sostenible y que alcance la certificación, que precisamente certifica que dicha producción cumple cuestiones legales ambientales, económicas y sociales.

 

“Al visitar la región de Campos Gerais de Paraná, es muy interesante ver cómo hay un diálogo técnico constante entre pequeños productores y empresas forestales más grandes. En la región, pequeños productores logran productividades excelentes y participan activamente en procesos de conservación. También hay toda una integración de la producción forestal con el polo maderero en la región de Telêmaco Borba (Paraná). Este proceso de desarrollo integrado de base forestal hizo que Telêmaco Borba, por ejemplo, presentara un crecimiento en el Índice de Desarrollo Humano Municipal (Firjan), subiendo de 0,66 en 2005 a 0,76 en 2016, superando a 77 municipios paranaenses en esa evolución”, dice Erich Schaitza, investigador de Embrapa Bosques y exgerente general del Proyecto Paraná Biodiversidad.

 

En Bosques Legales, los productores hacen cursos, actividades colectivas, visitas de intercambio y reciben gratuitamente mudas de plantas autóctonas para la recuperación de áreas degradadas. Además de incentivar la silvicultura de bosques plantados, de pino o de eucalipto con un plan de manejo sostenible, el programa también prevé el enriquecimiento de bosques secundarios, el auxilio en la conservación de fuentes hídricas y del suelo, la protección de la biodiversidad y la agricultura orgánica. Según Indústria Brasileira de Árvores (Ibá), el sector de base forestal conserva alrededor de 5,9 millones de hectáreas de áreas autóctonas en la forma de Áreas de Preservación Permanente (APPs), Reserva Legal (RL) y Reservas Particulares del Patrimonio Natural (RPPNs).

 

“Las ganancias generadas por dichos programas llegan a las comunidades y fomentan el ambiente de negocios de toda la región al traer beneficios como generación de empleo y riquezas, fijación de las familias en el campo con diversificación de las actividades e incremento de la renta. Este ciclo convierte al sector forestal en un importante agente del desarrollo económico y social del país”, afirma José Totti, director Forestal de Klabin.

 

Cada vez más Klabin expande sus programas de desarrollo local, pautados en la bioeconomía, que aumentan la conservación de los recursos naturales, manteniendo así el impulso económico y social. En Brasil, el sector genera 3,75 millones de oportunidades en más de mil municipios (Ibá), entre empleos directos, indirectos y el “efecto-renta”, cuando los puestos de trabajo no están directamente vinculados a la industria forestal, pero son estimulados por otros servicios a su alrededor, haciendo que la economía gire y la demanda de mano de obra local y regional aumente.